Recientemente hemos visto una campaña de autopromoción de Canal Plus en televisión, en la que 300 fans de la serie Juego de Tronos participaban como extras en el spot, siguiendo la invitación de la cadena.
La participación de los fans en la publicidad de las marcas es un fenómeno nuevo, originado sin duda por la gran influencia de las redes sociales en la comunicación entre empresas y clientes. El caso concreto de Canal Plus tiene un antecedente importante en la marca de chocolatinas inglesa Wixpa, de la empresa Cadbury Schweppes.
En el año 2003, Cadbury decidió dejar de fabricar Wixpa debido a la escasa demanda de ese producto en el mercado. Sin embargo, cinco años después, en 2008 un ejecutivo de la empresa descubrió una página de Facebook en la que 20.000 fans de la marca reclamaban a Cadbury que volviese a sacar Wixpa al mercado.
El ejecutivo pensó que si había 20.000 demandantes espontáneos, quizás merecía la pena aprovechar su entusiasmo para contagiar a muchos más y sacar de nuevo la chocolatina al mercado, apoyándola con una gran campaña de publicidad en televisión.
Comenzaron por mover la página de Facebook, invitando a los fans a probar gratis la nueva Wixpa, que salía de nuevo al mercado, esta vez por demanda popular. Y terminaron haciendo una gran campaña en televisión en la que intervenían 300 de sus fans (casualmente el mismo número que los de Canal Plus), que lo hicieron “Por amor a Wixpa”, como rezaba en el slogan empleado en la campaña.
En la actualidad, la pagina de Facebook de Wixpa tiene más de dos millones de fans, y es la chocolatina más vendida en el Reino Unido, con unas ventas anuales de más de cien millones de libras.
Parece que contar con los fans para la publicidad de las marcas puede resultar a veces bastante rentable.